MONTES DE BOADILLA 25/3/2012

Mientras muchos aficionados al ciclismo acudían a la cita anual con la RED-MTB en Aranjuez. Nosotros nos hemos desplazado hasta la localidad madrileña de Boadilla del Monte para realizar una ruta circular por el entorno del parque regional del río Guadarrama y los montes de Boadilla. Gracias a la colaboración de Pequeño y Juan Manuel el evento ha sido un éxito.

Montes de Boadilla

Hoy nos hemos juntado una buena panda de aficionados al MTB, y eso que al mismo tiempo en Aranjuez se sucedía la macro-quedada anual de la RED-MTB. Entre colegas, amigos, amigos de otros amigos, compañeros de trabajo y demás, casi llegamos a la treintena los que hemos disfrutado de una ruta interesante y divertida. El trazado de esta ha sido diseñada por Juan Manuel, un compañero de trabajo de Pequeño, que nos ha ido guiando por la zona, enseñándonos parte de los Montes de Boadilla y el entorno del parque regional del río Guadarrama, lugares que conoce muy bien, puesto que forman parte de sus entrenamientos cotidianos.

Boadilla del Monte

Sobre las 9,15 de la mañana llegamos a Boadilla del Monte. El punto de reunión se había marcado muy cerca del centro comercial del Caprabo junto a una gasolinera. Allí ya nos esperaban un montón de bikers dispuestos a pasar una buena jornada de ciclismo de montaña. Tras preparar las bicis y las presentaciones de rigor, iniciamos la marcha primero por las calles y jardines de una urbanizacion de pudientes. Para después continuar alejándonos de Boadilla a través de unos descampados donde se acumula algo de barro.

Monte del Encinar

Pronto entramos en el primer Monte de Boadilla, conocido con el nombre del "encinar", aunque antes hemos tenido que rodear una peligrosa glorieta, que otros compañeros incumpliendo la normativa han atravesado. Hay que tener presente que la parte mas vulnerable de la circulación somos nosotros, los ciclistas, y es precisamente por ello, que tenemos que dar ejemplo de buena conducta y procurar en la medida de lo posible evitar las acciones mas peligrosas, solo así, daremos un paso adelante en materia de seguridad vial.



Entrando en la urbanizacion Bonanza.

Luego circulamos por una agradable vereda que nos conduce a un pequeño sendero que discurre paralelo a la carretera. El grupo esta formado por casi 30 personas, hay que tener cuidado con los enganchones y los frenazos. Por esta zona el pelotón se alarga poniéndonos a fila de a uno, el sendero es muy estrecho no da para mas. En la cabeza Juan Manuel nos sirve de referencia, además de guiarnos, de vez en cuando nos comenta los lugares y sitios por donde pasamos. Todo un lujo contar con alguien que conoce tan bien la zona.

Con mi nueva bici.

Prefiero situarme en cola de pelotón, junto a mis colegas Pequeño, Manzana, Alberto "Australian Boy" y Charly. Desde esta posición siempre se puede reaccionar mejor ante cualquier adversidad o peligro. Delante en cabeza, se va muy rápido. Durante el primer tercio de ruta hemos siempre ido por encima de los 20 km/h. En un grupo con tanta gente siempre hay niveles y en esta ocasión se ha notado mucho la gente que estaba mas fuerte. Momentaneamente salimos de los caminos para superar la M-50 por un puente que nos lleva hasta la urbanizacion Bonanza, donde unos chalets de impresión nos dan sana envidia.

Observando estas construcciones, a uno se le queda cara de tonto, pero aun mas cuando vemos que la terraza de un chalet esta protegida por una verja de alambre de espinos. ¿Que tendrá que esconder este personaje para recurrir a estos métodos?. Mas que una casa parecía un campo de concentración. Bordeamos la urbanizacion "Las Lomas" para en seguida entrar en un camino que nos conduce hasta una parcela en medio del monte. Desde esta posición tenemos una estupendas vistas a la sierra de guadarrama, con sus cimas aun cubiertas de nieve. Tras superar esta casa se inicia el descenso del monte romanillos.

Personalmente me ha parecido la parte mas complicada de la jornada. Se trata de un descenso de casi 3 kms de longitud, quizás algo menos, aunque a mi se me hizo bastante largo. Es una bajada con fuerte pendiente, donde es fácil adquirir velocidades muy altas. El camino a veces se difumina haciendo complicado seguir el trazado que en ocasiones esta repleto de roderas y múltiples grietas que dificultan nuestro paso. En estos casos es mejor ser prudente que valiente, sobre todo yo que no poseo mucha destreza técnica.

Tras finalizar el peligroso descenso comenzamos el tramo mas vistoso del día. A continuación la ruta seguirá por la ribera del río guadarrama. Nos encontramos en pleno parque regional del río Guadarrama un espacio protegido de más de 22.000 hectáreas de superficie, con varios ecosistemas principales como los pastizales, los pinos y los cultivos de secano. Pero también con una peculiar fauna donde destacan el águila imperial, o la culebra bastarda entre otros. Por esta zona la parte más representativa es la denominada Dehesa de El Sacedón que se extiende desde los limites de Brunete hasta los dominios de Sevilla la Nueva.

Parque regional de rio guadarrama.

Transitamos por una vereda que va serpenteando el río a lo largo de su cauce. Casi siempre camuflados por una gran masa boscosa de arboles. Se trata de un trazado divertido pero también exigente, que nos hace estar en alerta en todo momento, con varios pasos técnicos que en ocasiones nos hacen desmontar y recurrir al empuja-bike, que nada me gusta. En concreto existen dos pasos complicados: en el primero de ellos nos topamos con un hundimiento de tierras junto al río que apenas nos deja espacio para proseguir entre una vaya metálica y el precipicio, si pisamos mal podemos caer al fondo del río. Y en el segundo tenemos que atravesar el río con la ayudan de un tubo de cemento y algunas piedras que afloran a la superficie.



Siguiendo el cauce del rio guadarrama



Rio guadarrama

El numeroso grupo se había estirado mucho por esta zona. Como es normal cada uno acomete estos escollos a su manera, algunos con mas pericia y otros con algo de torpeza, pero todos disfrutando de la magia de este lugar. De echo en sentido contrario nos cruzamos con varios grupos de bikers que al igual que nosotros gozaban de esta parte de la ruta. Reconozco que esta zona me gusta y mucho, ya la conocía de otras rutas (Getafe-Brunete y Leganes-EL Escorial) y siempre me ha parecido un sitio estupendo para la practica del MTB.

Es un lugar maravilloso digno de personajes de cuentos de hadas. Quizás estuvimos a punto de pisar un duende y no lo supimos. Las lluvias caídas días atrás habían dejado algo mojado el piso, en algunas zonas sombrías encontramos algo de barro. La característica predominante de esta parte del recorrido es la tranquilidad y el silencio. Si ponemos atención seremos capaces de escuchar los sonidos de la madre naturaleza. Parece mentira que existan sitios tan abruptos tan cerca de la capital.

Con Pequeño, Juan Manuel y otro compañero.

Este recorrido en compañía del río guadarrama termina en la urbanizacion El Bosque. Sin embargo llegar aquí no fue tarea fácil, antes tuvimos que afrontar un par de repechos de consideracion, donde el uso del platillo se hacia necesario si no queremos quedarnos a medias como le sucedió a mas de uno. Aquí hacemos una breve parada para avituallarnos e intercambiar algunas impresiones con la gente que no conocía. En seguida ponemos rumbo a Villaviciosa de Odon nuestro siguiente destino.

Llegando a Villaviciosa de Odon.

Uno de los inconvenientes de realizar rutas con mucha gente, es la organizacion. Yo que tengo la experiencia de haber salido en varias ocasiones en grupo se que es un tema complicado, pero necesario. Cuando me he unido al club MTB Leganes siempre he sentido que todo estaba bajo control. Sin dejar nada al azar, es un club joven pero lo tienen todo muy bien planificado y organizado, en este aspecto sabes que nada va a fallar. Siempre hay una persona guiando la ruta y uno o dos cerrando el grupo, todos ellos comunicados por walky para estar al tanto de cualquier incidencia. Todos ayudan a todos y cuando hay alguna variante en el recorrido siempre se queda alguien en el cruce para señalizar la dirección correcta. En este aspecto son un ejemplo de coordinación.

En muchas de las reiteradas paradas me intereso por un colega que había pinchado y llevaba las mismas ruedas que yo, las Shimano MT65, para tubeless. Me estuvo comentado mientras reparaba el pinchazo que el llevaba cámara, que estuvo una temporada probando con los tubeless y no le convenció el sistema. Pasándose de nuevo al clásico método de la cámara. Espero que esto no me pase a mi, de momento con los tubeless estoy muy contento, son muy ligeras y agarran muy bien, pero queda abierto el debate, ¿tubeless o cámara?. He aquí la cuestión.

A la altura de la urbanizacion Monte la Villa, tomamos un camino que discurre paralelo a la autovía de los pantanos. Tras superar un par de rampas de consideracion y vadear algún arroyo alcanzamos los dominios de La Veguilla. En algunos momentos el pelotón se estira tanto que algunas unidades, los que circulan a cola, pierden contacto. Manzana, Juan Manuel y algún otro se quedan a esperarlos. Esta claro que es un grupo que va a distintas velocidades. Minutos después llegamos a Villaviciosa de Odon, en este punto nos dejan algunos compañeros, unos por falta de fuerzas y otros por compromisos familiares. En una fuente cercana rellenamos los bidones, aun quedan muchos kms por delante, hay que abastecerse.

Circulando por la Ciudad del Banco Santander

La ruta sigue su marcha de nuevo por varios caminos que bordean la autovía de los pantanos hasta alcanzar la M-50 que superamos por un puente. Entramos en la ciudad del Banco Santander, recorriendo algunos de sus cuidados caminos diseñados para pasear a pie como montado en bici. Cerca de aquí se encuentran unos olivos centenarios procedentes de Sudafrica de una altura destacable, aunque hoy no es el momento mas adecuado para visitarlos.

Dejamos la ciudad de los banqueros para inmediatamente cruzar, ¡con mucho cuidado! las vías del tranvía y una carretera de circunvalación. Desde esta posición aun nos quedan 15 kms para terminar la ruta, pero sin embargo nos encontramos muy cerca de Boadilla del Monte y del punto de inicio. Es momento de evaluar las fuerzas. Algunos colegas fatigados y exhaustos deciden acortar, entre ellos Charly. Pensé que cogerían la carretera y las calles para llegar al Caprabo, pero luego me comentaron que fueron por caminos y que incluso tuvieron que pasar por un tubo colector que apenas tenia espacio suficiente para pasar una persona agachada. ¡No me lo puedo ni imaginar!, con lo simple que hubiera sido ir por la carretera. Falta de previsión, supongo???.



Montes de Boadilla

Desde lo alto de un monte contemplamos unas estupendas vistas al Palacio del Infante Don Luis, este fue  construido en 1765 por Ventura Rodríguez, uno de los arquitectos más importantes del siglo XVIII español, construcción que se integra dentro del neoclasicismo madrileño. En la actualidad el ayuntamiento cedió parte de sus terrenos a la asociación SGAE. Lastima que no pudiera hacer ninguna foto del mismo, la exigencia técnica de una pendiente me obligo a prestar toda mi atención. No pude soltar una mano del manillar para hacer una "picture" desde mi móvil. Poco después entramos en los Montes de Boadilla por donde circulamos con mucha precaución por sus senderos repletos de familias con sus niños y sus mascotas. Me gusta como va creciendo la pasión por la bicicleta, cada vez mas familias inculcan a sus hijos el amor por este deporte.

Campo de Golf Las Rejas

El agradable paseo por los Montes de Boadilla finaliza con una fuerte pendiente que nos lleva bordeando el campo de golf de Majadahonda. Junto a un puente que cruza la M-50 varios compañeros de grupo, en su mayoría venidos de Villanueva del Pardillo nos abandonan, no sin antes hacernos una foto de grupo, aunque con las ausencias de los abandonos. Por suerte, para los que aun seguíamos en ruta, aun nos quedaba el tramo mas divertido de todo el día.






Este se inicia tras cruzar un par de puertas que prohiben el acceso a vehículos. Fueron casi dos kms por una vereda muy estrecha, donde en ocasiones las ramas me iban apaleando. Sorteando arboles y matorrales mientras mi bici dibujaba continuos giros y contra giros, seseando hasta alcanzar los túneles de la autopista. Lo ideal es hacer este recorrido a buen ritmo para sentir sensaciones. Al terminar este tramo acabamos todos con una sonrisa de oreja a oreja.

Esta senda me recuerda mucho a la vereda del fraile que recorrí el año pasado mientras disputaba la Marcha de Sonseca. Para terminar la ruta volvimos a coger los mismos caminos que en el inicio, esta vez los encontramos con menos charcos. La ultima anécdota de la jornada la protagonizo Manzana al equivocar un camino que le llevo hasta la urbanizacion "Pino Centinela". Sobre las 14,00h llegamos al aparcamiento donde teniamos estacionados los coches, dando por finalizada la ruta. Después de 3h 30m (tiempo encima de la bici), a una media de casi 16 km/h. Por suerte las multiples caidas que se sucedieron durante la ruta fueron sin consecuencias. Lastima que no hubiera un bar cercano para apretarnos unas merecidas cervezas como demandaban Manzana y Charly.

Esta ruta por los montes de Boadilla y a la ribera del río guadarrama, me deja buen sabor de boca, con ganas de volver por la zona para seguir exprimiendo el resto de variantes. Además me ha permitido conocer a mas gente enganchada a este deporte y volverme a encontrar con viejos amigos. Mención especial merecen las féminas. En concreto Barbara y Bea que rodaron a muy buen nivel, preparadas para abordar otras empresas mas importantes. Por ultimo dar las gracias a Juan Manuel por guiarnos y mostrarnos un recorrido divertido e interesante.


PERFIL:

TRACK DE LA RUTA: